Luego está la fiereza con la que defendemos a quienes amamos: si alguien quiere hacerles daño, salimos en su defensa sin dudar; sin embargo, muchas veces permitimos que otros nos hagan daño sin encontrar el poder para defendernos o cuidar nuestra integridad. ¿Significa eso que nos resulta más fácil amar a otros que a nosotros mismos? ¿Tendrá algo que ver con esa condena social al "egoísmo" y con la asociación del amor con el sacrificio?
Mmmm.... Explora conmigo estas y otras ideas relacionadas con el amor por ti y aventúrate a emprender algunas prácticas, hoy en Tenemos que hablar.